Este es un test proyectivo basado en la pintura y en lo que esta dice de nuestro inconsciente.

Vamos a ir dando los pasos para realizarlo:

Lo primero es coger una hoja en blanco y dibujar una rosa, en el tamaño que queramos y con colores o blanco y negro.

Una vez que la demos por terminada, no vale modificarla, sobre todo, una vez que la empecemos a analizar.

Cuando empecemos a interpretar, la posición del folio para analizar la rosa sería, se pondrá como si te lo pegaras en el pecho con el dibujo para afuera. No mirándolo de frente.

Cada parte del folio tiene que ver con diferentes características de nuestra personalidad, que están relacionadas con las funciones de los hemisferios cerebrales.

– Si la rosa está pintada a la derecha del folio (o ocupando más la parte derecha), se relaciona con el hemisferio izquierdo Y se habla de características masculinas. Así la persona será más analítica, más lógica, se guían más por la razón que por el corazón. Son individuos muy organizados y les gusta planificarlo todo.

– Si la rosa está dibujada en la parte izquierda del folio (o ocupando más la parte izquierda), se relaciona con el hemisferio derecho y se habla de características femeninas. De este modo, la persona será más emocional, pasional, se guía por el corazón. Suelen ser individuos más creativos y artísticos.

– Si la rosa está dibujada en el centro del folio. Son personas equilibradas, son emocionales pero también utilizan la razón para tomar decisiones.

 

Si la Rosa que hemos dibujado fuéramos nosotros mismos, es decir, que la rosa se correspondiera a un cuerpo humano:

–       Las raíces o tierra donde está plantada la rosa serían nuestros pies o nuestras propias raíces. Si las hemos dibujado, tiene que ver con sentirnos enraizados, que caminamos con paso firme en nuestra vida, que nos percibimos como personas con seguridad, con apoyos, que “tenemos los pies en la tierra” y no fantaseamos, que somos realistas con las experiencias que vivimos. Y si no hemos trazado una línea donde estaría plantada la rosa, pues no contamos con estas características.

–       El tallo de la rosa se corresponde con nuestro cuerpo. Aquí se observan dos aspectos fundamentales: uno, si el tallo está muy curvado o delgado puede indicar problemas físicos en nuestro cuerpo (por ejemplo, problemas de espalda, en los ovarios, anemia,…). Y por otro lado, si el tallo es robusto y proporcionado, nos habla de una persona con una vida emocional sana.

–       Las hojas en el tallo, se corresponden con nuestros brazos y esto nos habla de los recursos personales con los que contamos y con la forma en que damos caricias a los demás. Nuestros recursos hacen referencia a la forma y estrategias con las que contamos para resolver las dificultades que se nos presentan. Al igual que hablamos anteriormente, hemos podido dibujar hojas a la derecha, entonces contamos con recursos masculinos; y si las hemos dibujado a la izquierda del tallo, contamos con recursos femeninos. Importante: Mirar la foto y sabréis cuál es la derecha o izquierda de la rosa.

–       El capullo de la rosa se corresponde a nuestra cabeza y a cómo pensamos. Si hemos dibujado un capullo grande y enmarañado, somos personas que pensamos mucho y le damos muchas vueltas a la cabeza, analizándolo todo y preguntándonos lo habré hecho bien o mal, sería mejor de esta forma o de la otra, la mejor decisión fue la que tomé o debería haber tomado otra. Son personas a las que le cuesta tomar decisiones por las vueltas que le dan a todo y las opciones que tienen en cuenta.

–       Las espinas del tallo tienen que ver con los mecanismos de defensa con los que cuentan las personas. De este modo, si habéis dibujado un tallo con un número de espinas proporcional al tamaño del mismo, sois personas que sabéis defenderos ante los ataques de los demás (y digo defenderos, no atacar a los demás), conocéis maneras distintas de defender vuestras ideas, domináis estrategias para salir de situaciones donde os están agrediendo. Y si se ponen muchas espinas, son individuos que suelen estar a la defensiva y se molestan con las críticas de los demás por que las viven como ataques.

–       Y el sépalo o la parte de la rosa que une el tallo con el capullo está relacionado con el cuello de la persona. Si no habéis pintado esta parte, sois personas a las que os cuesta decir lo que os molesta o no queréis hablar por no molestar a los demás, os tragáis cosas que no os gustan por que no haya un conflicto abierto.

–       Si habéis dibujado cosas anexas a la rosa, por ejemplo, otras florecillas, una mariquita, nubecitas, el sol o la luna, etc., muy en general, tiene que ver con personas que quieren agradar a los demás.

 

Respecto a los colores, primero hay que investigar el significado para la persona que lo ha dibujado pero también en general:

–       Rojo: personas pasionales, amorosas e impulsivas. Habla de rabia o enfado y también de agitación y tensión.

–       Rosa: tiene que ver con la feminidad o con aspectos femeninos.

–       Negro: culturalmente se relaciona con el luto y la muerte. Igualmente, con tristeza y ansiedad.

–       Blanco: con pureza, con ganas de que las cosas empiecen de nuevo.

–       Azul: con la maternidad o lo maternal. También se pinta de este color cuando queremos relajar nuestra cabeza.

–       Amarillo: se relaciona por un lado con la tristeza pero por otro, con la seguridad y la protección. Estimula la actividad mental.

–       Naranja: se utiliza cuando uno necesita energía y vitalidad. También se relaciona con la pareja.

–       Verde: se relaciona con la madre naturaleza, personas que necesitan raíces y sentirse terrenales. Es un color que equilibra las emociones.

–       Morado: se relaciona con la espiritualidad pero también para personas que necesitan cambios o están pasando por cambios en su vida.

 

Espero que podáis sacar algunas conclusiones sobre vosotros mismos con este sencillo test de la rosa y si queréis más información, no dudéis en preguntarnos o utilizar nuestro servicio de consulta terapéutica online.